miércoles, febrero 15, 2006

El Circo de la Justicia


La TV, además de proveer información, divulgar escándalos y algún que otro material de calidad, se ha convertido en el medio para dispensar justicia en treinta minutos (22 si tenemos en cuenta los comerciales). Me refiero a las “cortes” de pacotilla en las cuales se presentan muchos para dirimir alguna cuestión, generalmente referente a dinero.
Habiendo comenzado con “The People’s Court” hace años, hoy manejada por una jueza de origen cubano a quien solo le falta bailar el cha-cha entre dictamen y dictamen, “Judge Judy”, sin duda la reina del tema, histérica y gritona a veces, el género se ha expandido con copias de diferentes sabores. Así, tenemos al juez que, después de haber estado en prisión de joven “aprendió su lección, estudió y hoy es juez”, otro que tiene una “Corte Moral” en la cual se pretende dar lecciones de vida a los culpables, y por supuesto la televisión hispana no podía perderse la ocasión de copiar la cosa con jueces y juezas que, según ellos, dispensan justicia (algunos no son jueces de verdad).
Consejos, gritos, miradas amenazantes a los culpables, palabras enternecedoras para las víctimas y alguna que otra gracia para aflojar la tensión, no son más que puro entretenimiento y poco tienen que ver con una corte en serio.
Es curioso como tantas personas están dispuestas a hacer el ridículo en público y aceptan dilucidar sus problemas en televisión. Por otra parte, y debido a que no se trata en muchos casos de cortes o jueces reales, nada impide que los participantes lo hagan con el incentivo de ganar unos dólares.
Ojalá que los menos informados (la mayoría que disfruta de este circo) no crean que así es como las cortes funcionan y que tomen todo como lo que realmente es: Entretenimiento sin consecuencias